crónicas de insomnio

Friday, July 08, 2005

Capitalismo y el desarollo de tecnologías

No sólo podemos oponernos al capitalismo de manera tajante argumentando desde el mundo proletario. No es necesario ponerse en la acera del frente para poder lanzar dardos al capitalismo. Existen fallas internas, contradicciones que socavan las estructuras sobre las que se levanta el capitalismo como teoría moral, como eje de la justicia distributiva de hoy en día. Para ello, es necesario hacer mención de un pequeño problema en relación al desarrollo de tecnologías y el uso de recursos naturales. Para elaborar nuevos modelos de producción e incrementar la cuantía de la misma, el capitalismo ha recurrido a grandes investigaciones científicas que van creando nuevas formas de progreso productivo. Laboratorios dentro de las mismas empresas, científicos a sueldo en industrias, financiamiento de experimentos y otros ejemplos nos demuestran la unión férrea entre las nuevas teorías científicas y el desarrollo de tecnologías de producción. Por otra parte, existe el desarrollo de tecnologías que intentan manejar los recursos naturales de manera sustentable y las que intentan frenar la destrucción de los mismos. El progreso de estas últimas ha sido lento. Desde la década de los noventa, ya desocupdos de problemas ideológicos, la temática ambiental se puso en boga. Sin embargo, el número de empresas preocupadas del desarrollo de tecnologías que cuiden o prevengan la destrucción del ecosistema siguen siendo pocas. Si quisiéramos hacer una ecuación entre las velocidades de desarrollo de estas dos tecnologías (a saber, por un lado, las tecnologías de producción y por otro, las "tecnologías medioambientales"), el factor de multiplicación será muy distinto. De esta simple operación se deduce que el capitalismo siempre tenderá a la destrucción del ecosistema. Por más que nos dediquemos a buscar energías alternativas y desarrollemos proyectos de descontaminación, las tecnologías de producción y el abuso de los recursos naturales siempre estará presente y será mayor. Siempre habrá una diferencia en este desarrollo. Las tecnologías medioambientales actúan una vez que las crisis se hacen latentes. Recién hoy nos preocupamos de una posible crisis de agua. Lo mismo sucedió con la capa de ozono. En cambio, las tecnologías de producción actúan con una capacidad de predicción tremenda. Siempre se anticipan a los nuevos escenarios. Una inversión en tecnologías e investigación supone ganancias seguras.
Según todo lo dicho anteriormente, habré de suponer que la curva de devastación de los recursos naturales siempre será ascendente y tenderá al crecimiento (es decir, con una curva levemente inclinada hacia la vertical). La contradicción, a mi gusto, es ostensible: siempre estaremos abusando de los recursos naturales. Si desarrollamos tecnologías medioambientales con el mismo ímpetu con que desarrollamos tecnologías de producción que pueden abusar del uso de recursos naturales, esto podría revertirse. Sólo el capitalismo puede responder esto.

p.d- que me perdonen los matemáticos.

0 Comments:

Post a Comment

<< Home